Otra historia de fantasmas
Estoy sentado en mi casa, leyendo, o con los pies en alto mirando al techo. Pienso en todos los que han vivido aquí, en este mismo espacio, todos los que se han movido, han dado a luz, han recogido las toallas, las han colocado en su sitio, han cagado, han follado, han dormido. Todos hemos compartido este espacio. A todos convoco ahora, o quizá son ellos solos, que les gusta la idea, pero aquí están, aquí aparecen y estamos todos juntos en este espacio nuestro y nos movemos, vivimos a la vez, y nuestros cuerpos se solapan levemente cuando nos cruzamos, estamos un momento unos dentro de otros, pero seguimos doblando las toallas, mirando al techo, dando a luz, limpiando el lavabo, seguimos
y nos asomamos a la ventana y en la calle algo parecido está pasando y allí que vamos, todos los que alguna vez pasamos por estas calles, por estos caminos, estamos pasando justo ahora, y sí, nos solapamos, estamos unos momentos unos dentro de otros, y somos una multitud solapada, somos miles y miles y nos gritamos nos queremos nos tocamos y seguimos